2018 los reunió por primera vez, y los juegos superclásicos volvieron a enfrentar a los jugadores en una batalla imparable por la victoria, en la que cada uno de ellos es la baza de su equipo. Estilo individual de las rivales, similar al baile de bailarinas en Qatar.

Los juegos superclásicos siempre han sido famosos por sus interesantes alineaciones y su juego dinámico. En ellos, cada jugador de fútbol se esfuerza al máximo para aumentar las posibilidades de victoria del equipo. A pesar de ello, el próximo domingo la atención de todos los espectadores, entrenadores y críticos se centrará en los dos líderes, Agustín Rossi, en representación del equipo Boca Juniors, y Franco Armani, en representación del River Plate. Cabe señalar que este será solo el segundo encuentro de los dos titanes, ya que la última vez que se enfrentaron en un partido fue en la final de la Copa Libertadores hace cuatro años (en 2018).

No hace falta recordar cómo terminó la final, cuando el equipo de Nunes levantó victorioso el título de campeones al cielo madrileño. Pero primero lo primero. Las victorias, los caminos del devenir y el simbolismo difieren, sin embargo, ambas figuras siguen siendo indispensables en sus equipos.

Fue un día significativo para ambos jugadores, en el que uno de ellos tuvo que convertirse en reemplazo de Esteban Andradu, y el segundo ya pudo conquistar el amor y convertirse en el número uno del entrenador Marcelo Gallardo. El once de noviembre se convirtió para Rossi en el punto de partida desde el cual comenzó a construirse toda su carrera profesional, ese día recibió la primera ráfaga de aplausos de admiración y en la práctica probó el título de portero titular. Armani, sin embargo, solo confirmó su profesionalismo, dejándose llamar una leyenda del fútbol.

Durante la carrera de Rossi, fue criticado repetidamente por no ser "el tipo de portero que puede ayudar al equipo a ganar el partido". Tales declaraciones generaron polémica sobre la salida de Rusia y el regreso de Andrada al puesto de arquero, quien inicialmente lo dejó por una fractura en la mandíbula y la necesidad de dos meses de rehabilitación.

La situación fue algo diferente con Franco Armani, quien se unió al equipo hace más de 12 meses y desde entonces se ha convertido en una leyenda argentina. Baste recordar su desempeño con el Atlético Nacional, donde logró proclamarse campeón de la Libertadores en 2016. Además, tenía experiencia jugando en partidos de superclásicos, la cual demostró tanto en la Supercopa Argentina en 2018 como en La Ribera en la Superliga.

Un poco de números. Armani logró salvar al equipo de Bok en 12 ocasiones, habiendo sufrido solo una caída en dos ocasiones, una de ellas fue en la ½ Copa de 2019, que no tuvo ningún efecto para llegar a la final. Además, el arquero de River Plate ha estado involucrado en 5 partidos exitosos, 5 títulos de liga y 5 partidos sin éxito, ya que además de ganar partidos, también tuvo que soportar 2 dolorosos empates, especialmente el que llegó en la final del Argentino. Copa en 2021.

Rossi disputó 9 partidos ante River Plate, pero solo pudo demostrar su valía en 2 de ellos: un 2-1 en la larga distancia hace más de 5 años en el Estadio Monumental y otro cerrado en 2021. Después de eso, siguieron 3 partidos empatados, así como 4 perdidos.

A pesar de la aparente diferencia de niveles, ambos jugadores se parecen mucho más, sobre todo de cara al próximo Superclásico. Y mientras Armani tiene un alto rendimiento constante, el de Rossi ha crecido a medida que madura en el deporte profesional, desde el club de fútbol Lanús, donde pasó 18 meses, hasta la camiseta azul y oro de Boca Juniors.

Hoy, Rossi ya no es el mismo portero, la profesionalidad está en entredicho. En particular, esto fue facilitado por su cacareada intuición, que funciona durante un tiro penal. Entonces, solo este año pudo atrapar 8 goles finales, la mitad de los cuales cayeron en el tiempo reglamentario del partido y el resto, en la prórroga. Y si ahora cuentas todos los balones atrapados por Rossi, los resultados te sorprenderán: en 6 años, el arquero del equipo de Boca Juniors fue capaz de anular veinte penales, dieciséis de los cuales le vendrán bien para el juego en la actualidad. selección, 3 para Lanús, y 1 como parte de la Defensa y defensa”), lo que supone un récord absoluto que ningún portero ha podido batir hasta el momento.

En 2021, River Plate tuvo que soportar mucho sufrimiento en la Copa de la Liga y en Argentina, en la primera de las cuales Armani no pudo participar debido a la infección por coronavirus que lo azotó, y en la segunda, para dar al menos un tiro. meta.

El equipo de

Y ahora el portero de Jurado de Boca quiere vengarse, aunque solo sea por el hecho de que el club de fútbol piensa en la conveniencia de ampliar su contrato. La sed de venganza es tan fuerte que hizo retroceder todos los récords establecidos por él desde el punto de penalti. "Rossi se va de Boca, Rossi no se va de Boca". Y ahora los fanáticos cantan "El número uno tiene un intento de demostrar su valía al club de fútbol".

El histórico encuentro entre Armani y Rossi tendrá lugar 4 años después del último encuentro en Bomboner. El próximo será el Mundial, en el que Boca Juniors tiene muchas ganas de meterse. Por lo tanto, los resultados de los juegos superclásicos en este momento son cruciales.

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